Si no estuve allí para verte florecer
estaré allí
para verte madurar.
Si no vi tus pétalos
nacer y abrirse al cielo
veré esos mismos pétalos
mantener la frente en alto
ante la lluvia y el viento.
Llegaré…
como llega el rocío
hasta tus labios sedientos
Y bajaré
por la línea de tu cuerpo
hasta tocar la tierra
que se ha unido al cielo
desde que tú la pisas.
Seré cada día
brisa silenciosa,
llovizna de sol.
Tendré cada noche
abrigo y refugio,
cuando en mis brazos busques
todo el calor
que solo se acrecienta
cuando tu alma
enciende mi fuego
bajo las alas del amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario